12 de agosto de 2012

ARGENTINA - CÁNCER INFANTIL - HOSPITAL DE NIÑOS DE LA PLATA : GRACIAS AL ESFUERZO DE LOS MÉDICOS, EL APOYO PRIVADO, Y LAS TAPITAS QUE JUNTAN LOS ARGENTINOS, EN LA PLATA Y ALEDAÑOS 8 DE CADA 10 NIÑOS QUE SE ENFERMAN DE CÁNCER ... ¡ SE CURAN TOTALMENTE !

Buena Noticia :


Ya son ocho de cada diez los chicos que logran ganarle al cáncer en la Región de La Plata y sus alrededores


La experiencia de nenes platenses que, tras largos tratamientos, hoy están libres de la enfermedad


Por Omar Gimenez


Como su ídola Lucha Aymar, Abril Guerrero (13) nunca baja los brazos.

Es una característica que todos los integrantes de su familia le reconocen y no sólo cuando se pone la camiseta de Universitario para jugar al hockey: tras un largo tratamiento, Abril hoy está libre del cáncer que le diagnosticaron en 2005.

Dice su mamá, María Dasseville, que en los momentos más difíciles, Abril se internaba llevando su máquina de coser de juguete.

Hacía collares, pulseras, manualidades. Se preocupaba por el colegio y por el ajedrez, su otra pasión.

En esos días, María y Abril pasaban todo el tiempo juntas y habían inventado un estribillo que repetían una y otra vez: “si Abril llora, mamá llora”, decían.

... O al revés. Entonces no lloraba ninguna de las dos. Y seguían adelante.

Abril, apenas terminado el tratamiento, empezaba sus clases de inglés con el mismo gorrito con el que iba a la escuela para que no se note que no tenía pelo por la quimioterapia.

Ahora que vuelve a lucir orgullosa su cabello largo y ni siquiera tiene que tomar medicación, Abril juega al hockey, vive pendiente de su flamante blackberry o de la compu.

¿El tumor?: algo que va quedando atrás a medida que se espacian los controles de rutina que actualmente se hace una vez por año.

Abril integra la larga lista de chicos que logran superar el cáncer en la Región, donde el 82% de los nenes afectados se consideran libres de la enfermedad.

Treinta años atrás ese porcentaje ascendía al 20%, según indica Daniel Polono, Jefe del Servicio de Oncología del Hospital de Niños y Vicepresidente de la Sociedad Argentina de Oncología Pediátrica.

Los avances en los tratamientos mejoraron el pronóstico y ayudaron a reducir los tiempos de recuperación.

El desafío que viene es lograr una mayor celeridad en el diagnóstico. Y desmitificar la palabra cáncer que, al menos en el ámbito de la pediatría no debe ser tomada -como frecuentemente sucede- como sinónimo de muerte.

Así lo afirma el especialista, quien propone “tenerle respeto, pero no miedo” a la dolencia que genera un promedio de 1270 casos nuevos por año en todo el país entre los chicos y más de 300 en la Provincia.

Los cánceres más comunes en los niños : las leucemias y los tumores del sistema nervioso central.

A diferencia de los tumores que afectan a los mayores (carcinomas, con menor número de células, que tardan mucho en manifestarse y cuya respuesta a los tratamientos es dispar), los más frecuentes entre los chicos son embriomas, caracterizados por estar conformados por tejidos con abundancia de células, que se manifiestan rápidamente (a veces en apenas 24 horas) y que reaccionan mejor a los tratamientos.

Lo inespecífico de los síntomas de algunos de los tumores pediátricos más comunes hacen que desde la Sociedad Argentina de Pediatría se haya puesto el acento, en los últimos años, en capacitar a los médicos para una detección más rápida.

El mejor pronóstico no obsta para que el diagnóstico de cáncer pediátrico siga teniendo un fuerte impacto en las familias afectadas.

Para los chicos representa afrontar tratamientos muy exigentes y romper drásticamente con sus rutinas cotidianas.

Y sus familias lo viven con una mezcla de angustia e incertidumbre, a veces obligadas a dejar su lugar de origen para dirigirse a algunas de las ciudades donde se encuentran los centros de referencia para el tratamiento.

La Plata es una de ellas: en el Hospital de Niños Sor María Ludovica y en los porteños Gutiérrez y Juan Garrahan se concentra el 70% de la atención del cáncer pediátrico proveniente de otras provincias y hasta de países limítrofes que no cuentan con centros especializados.

Mariana Moser es psicóloga y notó que esas familias, necesitaban una contención especial.

A partir de esa inquietud nació en La Plata la Fundación Creando Lazos, que ya asistió a más de 100 familias de chicos con cáncer. Allí recibieron asistencia integral, asesoramiento y contención psicólogica y recreativa.

“Las familias suelen llegar devastadas por el diagnóstico y por la carga negativa que tiene la palabra cáncer. Por eso nosotros creemos que hay que desmitificarla, quitarle esa connotación que la asocia necesariamente con la muerte”, dice Moser, que preside la Fundación.

Las principales consultas de los padres tienen que ver con la naturaleza de la enfermedad y los tratamientos. También preguntan si conviene o no decirles a los chicos la verdad sobre lo que padecen. En este caso, el consejo es siempre -considerando la edad del niño y su capacidad de comprender- ser honestos.

“Los chicos lo toman con más naturalidad, se adaptan mejor a su realidad. No les importa cómo se llama lo que tienen, sólo quieren curarse pronto. Y la mejor manera de ayudarlos es con el afecto”, dice Mosser.

Como los tratamientos suelen ser prolongados y exigir largas internaciones, lograr desconectar a chicos y padres de la omnipresencia de la enfermedad es clave.

Es por eso que desde Creando Lazos se instrumentan programas de visitas, en los que los voluntarios acompañan a los chicos y a sus padres en los hospitales; se organizan salidas recreativas -con los pacientes ambulatorios- y se promueve el contacto entre chicos y padres que viven la misma realidad.

Desde la óptica de los padres que viven esta experiencia, no se trata de cuestiones menores: María Dasseville recuerda que en los peores momentos del tratamiento de Abril “no soportaba a quienes no se acercaban a sumar. En esa instancia lo que querés que te aporten es alegría”.

Una alegría que está intacta en los chicos que, como Abril, superaron el desafío.


Cómo ayudar :


La fundación platense Creando Lazos ofrece contención gratuita a familias afectadas por el cáncer pediátrico. Se puede colaborar donando tapitas plásticas de gaseosas a los teléfonos 4513867 o 155960038 o dinero a la cuenta corriente número 0504380 del Bco Provincia.


(Fuente : diario El Día de La Plata)

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